CURP biométrica: ¿cómo funcionará y qué datos incluirá?
- Ivan Cruz
- hace 16 horas
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El Congreso aprobó cambios a la Ley General de Población y a la Ley General en Materia de Desaparición Forzada. Estas modificaciones incluyen la creación de una nueva versión de la Clave Única de Registro de Población (CURP) que tendrá datos biométricos y que sustituirá a la credencial de elector como documento oficial de identificación.
Es decir, esta medida busca que la CURP sea en adelante el documento oficial de identificación obligatorio, tanto en formato físico como digital, válido en todo México.
La CURP biométrica incluirá, además de los datos básicos, información biométrica única de cada persona. La Secretaría de Gobernación (SEGOB) será la encargada de reunir estos datos, y la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones se encargará de manejar la versión digital para validar y comprobar trámites en línea.
Los datos que traerá la nueva CURP serán:
Nombres y apellidos completos
Fecha de nacimiento
Sexo o género
Lugar de nacimiento
Nacionalidad
Fotografía, para reconocer visualmente a la persona
Huellas dactilares, para confirmar la identidad de forma segura
La ley establece que todas las personas nacidas en México, así como los extranjeros con estancia legal, deberán tener esta identificación. Para facilitar su uso y consulta, se creará una Plataforma Única de Identidad (PUI), que permitirá verificar los datos en tiempo real y usarlos para trámites tanto públicos como privados.
Esta plataforma conectará bases de datos de distintas dependencias, como seguridad, justicia, salud y educación, con el fin de ayudar en la búsqueda y localización de personas desaparecidas.
La reforma también señala que todas las autoridades y personas deberán aceptar la CURP biométrica como identificación oficial. Si no lo hacen, podrían recibir multas de hasta 20,000 veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), después de una advertencia previa.
Sin embargo, esta medida ha generado preocupación en varios sectores. La oposición ha cuestionado la seguridad y los posibles daños a la privacidad que puede causar juntar tantos datos biométricos.
Ricardo Anaya, líder del PAN en el Senado, dijo que esta iniciativa podría facilitar un sistema de vigilancia masiva y un gobierno espía, donde el gobierno podría acceder a información muy personal, como huellas digitales, fotos, hábitos de consumo y ubicación en tiempo real.

Expertos en derechos digitales, como Grecia Macías, advierten que los datos biométricos no se pueden cambiar y que si se filtran, pueden poner en peligro a las personas. También preocupa que la ley obligue a ciudadanos y entidades a entregar estos datos, lo que podría ser usado de forma incorrecta.
Otra crítica importante es que no se consultó lo suficiente a la sociedad civil ni a los colectivos de madres buscadoras, que han sido clave para encontrar a personas desaparecidas. Legisladores de oposición señalan que la ley deja fuera medidas importantes para proteger a estos grupos y no asegura recursos para su cuidado.
Algunos expertos dudan que la CURP biométrica ayude realmente a resolver el problema de las desapariciones, pues bases de datos como la del Instituto Nacional Electoral (INE) ya tienen gran parte de esta información.
La reforma fue aprobada en la Cámara de Diputados y enviada a la presidencia para su publicación, pero el debate sobre cómo equilibrar seguridad, privacidad y derechos humanos sigue abierto en México.